El efecto de la miel en la piel es realmente impresionante. Aunque la miel está al alcance de la mano, no aprovechamos suficientemente sus beneficios, ya que además de usarla en el té, solo la incluimos en los postres navideños. Sin embargo, si la aplicamos en el rostro, puede ser muy efectiva contra las arrugas.
Efecto de la miel en la piel
La miel es excepcional para la piel. No es casualidad que muchos productos para el cuidado de la piel contengan este maravilloso ingrediente debido a sus efectos beneficiosos. La miel contiene todo lo que la piel necesita. Nutre y cuida la piel de manera excelente. Tiene propiedades antibacterianas, antiinflamatorias y bactericidas, por lo que también se recomienda como mascarilla para tratar el acné. Además, favorece la curación de cicatrices y heridas debido a sus efectos beneficiosos.
Debido a su capacidad para retener agua, es ideal para hidratar la piel, lo que la mantiene flexible durante mucho tiempo. Sin embargo, no solo tiene efectos antienvejecimiento, sino que gracias a sus ricos antioxidantes también protege contra los dañinos rayos UV. Mejora la circulación sanguínea, acelerando la eliminación de toxinas. Es rico en vitaminas y minerales, así como en potasio, magnesio y hierro. Incluso en la antigüedad, las mujeres lo usaban mezclándolo con leche y aplicándolo en su piel para mantenerla joven, suave y radiante.
Remedios caseros con miel
Podemos hacer que nuestra piel luzca joven y radiante con preparados y mascarillas caseras. (Es importante tener en cuenta que la miel que utilizamos no debe estar grumosa o cristalizada, ya que esto podría irritar la piel.) Aquí tienes algunos consejos:
Como exfoliante para la piel:
Mezcla 1 cucharadita de posos de café con miel y aplícalo en la piel previamente limpia y húmeda del rostro. Masajea suavemente en círculos, evitando los ojos, la boca y la nariz. Déjalo actuar durante 15 minutos y luego enjuágalo con agua tibia.
Como mascarilla facial para piel normal:
- Mezcla 1 cucharada de miel tibia con 1 cucharada de aceite de almendras y un puñado de semillas de girasol peladas y sin sal, previamente trituradas. Mézclalo bien y caliéntalo ligeramente. Aplícalo con cuidado en el rostro y, después de media hora, enjuágalo con abundante agua.
- Calienta 2 cucharadas de miel y mézclala con 2 cucharadas de requesón bien triturado. Aplícalo en el rostro (también puedes aplicarlo en el cuello o el escote) y, después de 20 minutos, enjuágalo con agua tibia.
Para piel seca:
- Mezcla 1 plátano pequeño machacado con 1 cucharada de crema, 1 cucharada de aceite de oliva y 1 cucharada de miel tibia. Luego, aplícalo en el rostro y, después de 15 minutos, enjuágalo con abundante agua.
- Mezcla 2 cucharadas de jugo de manzana con 2 cucharadas de polen de flores, agítalo bien y déjalo reposar durante una hora. Cuela el polen con un colador o un paño fino y mezcla con otras 2 cucharadas de miel tibia y 1 yema de huevo. Aplica la mascarilla resultante en el rostro y enjuágala con agua tibia antes de que se seque.
Para todo tipo de piel:
- Mezcla 1 clara de huevo con 2 cucharadas de yogur natural, 1 cucharada de miel y unas gotas de jugo de limón. Déjalo reposar unos minutos en el refrigerador para que se mezclen bien. Luego, aplícalo en el rostro con movimientos circulares y enjuágalo después de 20 minutos con agua tibia.
La miel suaviza e hidrata incluso la piel seca y áspera. Las vitaminas y los minerales que contiene regeneran la piel cansada, lo que hace que la piel del rostro esté más fresca y juvenil. Por sí sola, aumenta la circulación sanguínea y calma la piel. Si no hay tiempo para una mascarilla, aplica miel en el rostro y enjuágala después de unos minutos.
Baño de miel
¡Un baño de miel puede hacer maravillas! En la sauna, sobre la piel calentada y cuando los poros ya están bien abiertos, aplica miel, ya que nutre y calma la piel. No te dejará pegajoso, ya que se vuelve más líquida con el calor y se absorbe completamente al final de la sesión de sauna.
Masaje de miel o masaje con miel
El masaje con miel tiene un efecto reflejo. Según la medicina tradicional china, la condición para la salud es el flujo ininterrumpido de energía vital, el «Qi» (Chi) en el cuerpo, y si este flujo se bloquea, puede dar lugar al desarrollo de enfermedades. La miel ayuda a regular el flujo de energía en el cuerpo y restaurar su equilibrio saludable. También ayuda a eliminar adherencias anormales del tejido conectivo. Su contenido de vitaminas y minerales penetra profundamente en la piel y ejerce allí un efecto beneficioso.
Hay una gran variedad de productos cosméticos a base de miel disponibles en tiendas y tiendas de hierbas. La mayoría de ellos contienen no solo miel, sino también otros productos de la colmena. El polen de flores, la cera de abejas y la propóleos contienen, al igual que la miel, muchos ingredientes activos valiosos.
https://es.wikipedia.org/wiki/Miel
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